No era necesario descubrir a nadie que el pueblo de Patones de Arriba es uno de los destinos consolidados de visita de fines de semana para buena parte de los madrileños.
Las calles y casas de este pintoresco pueblo de pizarra en la Sierra Norte de Madrid albergan una de las mayores concentraciones de restaurantes de calidad en zona rural de nuestro país.
Ahora no solo se puede trabajar con intuiciones, cuando el Ayuntamiento de Patones encargó a MÉRCODES el estudio «Investigación de mercado: Satisfacción de la clientela actual en Patones de Arriba«, en el año 2002 nadie se podría imaginar algunas conclusiones de las ventajas de preguntar directamente al consumidor.
Se hace manifiesto que existía un grave problema de aparcamiento determinado por la capacidad física de acogida de vehículos, más del 60% de los visitantes cometían irregularidades de aparcamiento que podían ser objeto de sanción.
Además más de un 40% de los visitantes no son clientes directos ni de los restaurantes ni de los alojamientos del núcleo. Pese a la abundancia de recursos existentes, Patones de Arriba no es un destino especializado en la práctica de actividades de ocio y recreación al aire libre.
Patones de Arriba no estaba aprovechando suficientemente sus recursos y buena parte de los visitantes desconocían gran parte de los recursos existentes.
Con estas y otras conclusiones se articularon una serie de medidas a consensuar con vecinos y empresarios para generar una mejora de la oferta turística. El control del acceso de coches al núcleo, la articulación de un sistema de reserva de mesas on-line, la construcción de un aparcamiento disuasorio, la recuperación de un camino como senda ecológica de acceso al núcleo, han sido algunas de las distintas medidas que han ido trabajado en la consolidación de este destino turístico, como conclusión de esta investigación.